lunes, 31 de mayo de 2010

Segregación Miraflorina a la orden

Manuel Macías alcalde de Miraflores cede ante la opinión de algunos vecinos para hostilizar a Lori Berenson y que se mude a otro distrito. La base de su caprichosa postura sería que el distrito de Miraflores y sus vecinos han sido castigados duramente por el terrorismo, como para tolerar a una vecina sentenciada por ese delito.

Pero el distrito de Miraflores también ha sido castigado por sicarios del narcotráfico y no por ello investigan a las cadenas de distribución de drogas en sus calles, a vista y paciencia del serenazgo. El distrito de Miraflores tiene la amenaza mortal de contagio del SIDA gracias a la extensiva prostitución -masculina y femenina- que alberga, y para muestra un botón: la calle de las pizas y el parque JFK.

Hagámonos una buena pregunta: ¿cuántos ciudadanos peruanos juzgados por terrorismo están en las calles, después de cumplir sus condenas o con semi-libertad? ... ¿Acaso alguien ha sido segregado por el alcalde de su distrito?... ¿Acaso los vecinos les han hecho cargamontón y pifias?... Respondemos que en todos los barrios populares, de donde son oriundos la mayoría de ex-presos políticos, les han dejado vivir y reconstruir sus vidas.

Entonces, ¿por qué Miraflores, que ya no es barrio pituco, quiere hacer la diferencia? Aquí nos enfrentamos a algo que anida en la conciencia de la mayoría de peruanos: nos caen mal los extranjeros que interfieren en problemas internos del país. Pero nadie pifió a Pedro Pablo Kuscinzki, quien siendo ciudadano norteamericano, fungió como ministro peruano, contra lo que indica la Constitución. En síntesis, la gringa, por ser gringa afiliada al lado equivocado, les cae mal.

Y para nadie es un secreto que muchos egresados del penal, ex-sentenciados por terrorismo, viven en Miraflores. No me refiero a los del MRTA, solamente, sino a quienes pertenecían o fueron acusados de pertenecer al grupo que puso el coche bomba de Tarata (que obviamente no fue el MRTA).