Lalo Cabral

Pasión en los dedos

Es el seudónimo de Lalo Castro quien ahora lejos de victimas del vacío su anterior banda, busca seguir en la música con sus propios proyectos pero al interior de su mente, conociendo su poca laboriosidad de seguro este proyecto aun duerme. Ahora se ha interesado por la fusión de elementos musicales (contemporáneos, góticos, barrocos e incluso folklóricos y ancestrales) antes inconcebible en él, no solo por lo huraño que suele ser si no también por sus preceptos, recordar con cierta gracia que a fines de los ochentas quiso ser diseñador de ropa, que desde una perspectiva esnobista a ultranza seleccionaba sus amistades, también recordar eso que alguna vez planteo la existencia de un escuadrón anti-cholo por que allí si hay ese sentimiento de repugnancia el mismo que siente Abraham Ibáñez por un animador de polladas, pero los tiempos cambiaron, la poca sostenibilidad de aquellas aspiraciones y la poca receptividad en circuitos pitucos lo conllevaron a lo inevitable; acriollarse y sobretodo cholificarse, y lo fue haciendo. Pero cierto sentimiento de superioridad por efecto de arrastre le dejo otro rasgo de conducta; la majadería, pero a la par desarrolló sensibilidad, leyó un poco más y con su guitarra a la mano se hizo compositor.

Lector interesado de Borges, devoto de Dalí y feligrés de cocteau twins. Recuerdo por leer un prologo de una obra de Borges, dijo a las amistades y contertulios de juerga que ya había encontrando el camino para convertirse en un dios y con todas estas habilidades adquiridas nos dijo que el sabe que era mas que nosotros, mas que cualquiera. Que estaba convencido que la mujer era un ser inferior, como es de suponer esa actitud tuvo su final el mismo se dio cuando tuvo su primera enamorada.

Integró dos bandas la recordada, sentida y acaecida; asesinos del tímpano, luego la decana; victimas del vacío, la misma que integró con gusto y disgusto por espacio de diez años en la misma que fue el principal compositor, pero su exquisitez lo llevo a retirarse de esta banda e idear otro proyecto llamado the cholo, junto a un legendario amigo si se trata de Paul Quiroz.

Ahora buscan arriesgar con este proyecto, y parece (de perpetrarlo) que estaremos ante una obra musical revolucionaria diferente y de gran aporte, en lo único que hay que reparar es en esa exquisitez que le caracteriza como todo un ser sublime, sublimadísimo, esperar que los ensayos y posibles presentaciones coincidan con su estado de ánimo, su voluntad muchas veces controvertida y sobretodo con las ganas que en un segundo y de forma inexplicable las pierde. Pero Paul sabrá como enfrentar algo así por algo es su amigo y no tiene corona si lo soportaron los victimas del vacío lo soportamos nosotros, porque no lo puede soportar él. Al fin y al cabo es un mortal.

SU TRAYECTORIA RUTILANTE: desde 1987 donde decidió ser un escolar relajado, pintarse el pelo, delinearse los ojos, y hacerse un coquetón CORTE HONGO. Estamos hablando de uno de los momentos mas trascendentes para Lalo, si, cuando fue seguidor de la moda new wave. Oportunidad para sentirse el excluyente de la provincia, el galáctico de la plazoleta, es entonces donde en esta aldeana ciudad de Chiclayo de los ochentas empezó a ser popular, si no lo deducen reacuérdenlo como el Poggi. El tiempo pasó esa célebre década quedó atrás. A principios de 1993 Lalo funda con Alexei Chacón la recordada banda asesinos del tímpano, alexei se retiró fue cuando, Orlando Jiménez, Paco Irigoyen, Percy Falla y el apoyo en el bajo de Karl MENA en 1994 debutan en público y a desde allí comienza la reciente historia de la escena rockera chiclayana. Cansados de aquel periplo emocionante aunque frívolo fundan a mediados de 1996 la veterana banda llamada victimas del vacío y con marchas y contra marchas se hacen conocidos a nivel macro regional y a partir de su experiencia hacen poesía e incluso la publican, 1997 era un tiempo difícil no solo Lalo se sentía un ser divino, Paco lo había leído y escuchado todo era impresionante conocía todos los temas, lo sabía todo, e incorporan al inefable Lucho Bocanegra.

Desde el año pasado ya no integra V. del V. Todo esto porque se le dio la regalada gana, se cansó y nadie tiene porque exigirle algo a tremendo ser exquisito, aunque Fernando Odiaga discrepe con este muy humilde articulista no hay duda que Cabral es todo un divo para si mismo.

Hoy Lalo quiere hacer fusión pero se impondrá lo que se le antoje ojala se anime a tocar en serio, dicha actitud por cierto no es de extrañar en LALO CABRAL.